Los orígenes de nuestra Hermandad se remontan al mes de febrero de 1721, como así da testimonio el documento hallado en el Archivo General Diocesano de Toledo.

Este documento es de un gran valor testimonial por ser el más antiguo del que disponemos. Son 20 ordenanzas o estatutos por los que deberían regirse las personas que, a partir de entonces se incorporasen a la denominada Cofradía de Nuestra Señora del Rosario.

Va dirigido al Obispado de Toledo para que autorice la creación de esta entidad religiosa donde los firmantes se comprometen a cumplir fielmente las ordenanzas, así como fomentar el culto a la Patrona de la Villa de Torrejón de Ardoz Nuestra Señora la Virgen del Rosario.

De estas ordenanzas podemos destacar, como puntos más importantes, los siguientes:

  • Especificar claramente la imagen a la que iban a rendir culto, así como su ubicación dentro del templo, al lado de la puerta de la sacristía.
  • Las procesiones a realizar en el transcurso del año; el primer domingo de Febrero de cada año: las Candelas.
  • Resurrección.
  • El segundo domingo de Marzo que era la fiesta principal y la Batalla Naval (cabe deducir que era una representación para conmemorar la Batalla de Lepanto en la cual la Cristiandad se encomendó a la Virgen del Rosario, por expreso deseo del Pontífice Pio V, para que la victoria contra los turcos les fuese favorable, como así sucedió el 7 de Octubre de 1571).

La petición anteriormente mencionada en el antiquísimo documento iba avalada por un escrito favorable a la creación de la Cofradía del entonces Párroco de San Juan Evangelista Don Benito Durán. De hecho fue autorizada por el Obispo en el mes de marzo. Es probable, según se desprende de los comentarios del Párroco en su misiva, que la Cofradía existiera con anterioridad.

Es nuestro más encarecido empeño encontrar la documentación que así lo acredite. Es una deuda para honrar a los que nos precedieron y, sobre todo, un compromiso con las generaciones futuras para que conozcan y sepan valorar la Historia de nuestra Hermandad.

LA HERMANDAD EN EL SIGLO XIX

La Hermandad más numerosa de las que componen el tejido religioso torrejonero es también probablemente la más antigua.

La Cofradía de Nuestra Señora del Rosario como fue fundada en su origen, fue una Cofradía que organizaría como comentábamos antes cuatro actos durante el año: la Procesión de las Candelas, el Domingo de Resurrección, el segundo domingo de Marzo, y la Fiesta Naval en octubre.

Las dos primeras se conservan sin variación, pero las dos últimas se fusionaron en el siglo XIX, dando lugar a las Fiestas Patronales de Torrejón, las “Fiestas de Octubre”. Y es que hasta 1850, la Fiesta Grande torrejonera se celebraba en pleno mes de marzo, teniendo una segunda parte en octubre, en concreto el día 8, fecha en que se conmemoraba el final de la Batalla de Lepanto. La explicación, que las tropas españolas de Lepanto se encomendaron a la Virgen del Rosario, por lo que el Papa Pío V decidió que los pueblos encomendados a su protección recordaran la efeméride todos los años. El paso del tiempo y los cambios en el santoral acabaron llevando la festividad al otoño, tal y como se celebra hoy.

La Cofradía comenzó su vida con 5.000 viñas y tres fanegas de tierra, importante patrimonio que fue expropiado durante la desamortización de Madoz, dejando a la Hermandad a expensas de las cuotas de sus miembros, y de las subvenciones del Ayuntamiento para sostener las Fiestas del municipio.

LA HERMANDAD EN EL SIGLO XX

El capítulo más duro en la historia de la Hermandad se producía poco después de comenzar la Guerra Civil española. Nada más llegar el Bando Republicano a Torrejón, sacaron la Imagen de la patrona de la Iglesia y la tirotearon en medio de la Plaza, ante la horrorizada mirada de los vecinos.

Precisamente dos de ellos, Ángel Díaz y Clara Soler, prometieron que si salían de la cárcel donde fueron detenidos, comprarían una nueva Imagen de la Virgen del Rosario, Imagen que ocuparía el Templo una vez terminara la Guerra, y que aún hoy se venera. Es obra del imaginero madrileño Garín.

Recuperados del sacrilegio, la historia de la Hermandad entró en una nueva fase, en la que se ha caracterizado por su constante crecimiento. En 1976, por iniciativa del señor concejal Pedro Sanz, nace la tradición de la Ofrenda Floral, que irá creciendo con los años hasta convertirse en el gran acto que es ahora; dos años después el Presidente de la Hermandad Rufino Navarro inicia la tradición de los trajes de Goyescos, que llevarán niños y mayores en las Procesiones; en 1994, se crea el Coro Virgen del Rosario; en 1995 se estrena el himno a la Virgen.

LA HERMANDAD EN EL SIGLO XXI

En 2007, se recupera la tradición de los anderos, que se había abandonado en 1967, fecha en que se compró una nueva carroza para la Patrona con ruedas. Desde ese año, y con el objetivo de portar en sus hombros los Pasos de la hermandad, se crean las Damas y Caballeros de la Virgen, encargados de portar las imágenes por las calles de Torrejón. Ellas llevarán a la Virgen en la Procesión de las Candelas y al Cristo en el Domingo de Resurrección; mientras que ellos portarán a la Patrona en las Fiestas Patronales y el Domingo de Resurrección.

Uno de los momentos más importantes para la historia de la Hermandad se producía en 2010, cuando se conseguía la Coronación Canónica de la Virgen, y además en tiempo récord, en enero se hacía la petición al Obispo, en Febrero se aprobaba y en Mayo, el 23, se celebraba la ceremonia oficiada por Reig Pla, y a la que acudieron la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el alcalde Pedro Rollán, y autoridades civiles y militares de toda la región.

Así la Hermandad, que ronda los mil quinientos miembros, ya se prepara para su tricentenario, que se producirá en 2021, y que sin duda, se convertirá en un gran acontecimiento en Torrejón.

A día de hoy y mientras haya un solo hermano dispuesto venerar a Nuestra Señora Virgen del Rosario de Torrejón de Ardoz, seguiremos escribiendo la historia de una de las Hermandades más antiguas de nuestro País.